¿Qué hacer con las papillas de cereales si tu bebé no las come? ¿Qué os parece un bizcocho de papillas?
No me gustan las papillas de cereales y no me han gustado nunca. Creo que esto se lo he dejado claro a mis padres desde el primer momento. Yo soy más de comerme un trozo de pan, me encanta. Pero lo que tengo claro es que ellos tenían grandes expectativas puestas en estas papillas, viendo la cantidad que tenían en casa. Parece que se habían dedicado a comprar todas las papillas del Súper en el confinamiento, en lugar de papel higiénico, como unas personas normales!!
El caso es que me apunte un tanto al conseguir de desistieran en sus intentos de darme papillas, pero más tarde me he enterado de que ellos se han apuntado otro tanto al conseguir que me las comiera, aunque fuera en una receta alternativa a la tradicional. Cachis!!
Os voy a poner la receta de este bizcocho de papillas tal y como lo hace mi padre. Él dice que es una receta suya pero en realidad lo único que ha hecho es adaptar la receta del típico bizcocho de yogur. Yo no le digo nada para no quitarle a ilusión.
Ingredientes:
3 huevos
1 yogur natural.
2 medidas de yogur de papillas (tienen un 98% de mezcla de harinas)
1 medida de yogur de harina de trigo integral.
1/2 medida de yogur de aceite de oliva.
1/2 medida de yogur de panela.
16 gramos (1 sobre) de levadura seca.
Ralladura de limón y zumo de limón (1/3 del limón).
Frutos secos crudos para adornar.
Y así es como lo hace, que le he visto ya muchas veces y me lo he aprendido:
En un bol bate los 3 huevos (que no estén sacados directamente de la nevera). Hay que batirlos muy bien, él usa unas varillas. Añade la panela y sigue batiendo Añade, en este orden, el yogur, el aceite, la ralladura de limón y el zumo de limón. Y lo mezcla todo. Añade la mezcla de papilla, harina y levadura. Tamiza todo previamente.
Empieza a mezclar todo y enseguida se le hace una masa difícil de manejar. Sigue mezclando durante unos minutos más.
Para finalizar reparte la mezcla en un molde y lo decora con los frutos secos crudos. Él usa el molde que pongo en la foto pero puede ser el típico de bizcochos.
Como veis, es una receta bastante sana. Tiene muy poca azúcar y las harinas que contiene son casi todas integrales.
Me lo empezaron a dar para desayunar y no han parado hasta hoy. Sí que es verdad que cuando me enteré de qué estaba hecho estuve a punto de dejar de comerlo por la rabia que me dio a ver que se estaban saliendo con la suya y me estaba comiendo las papillas pero… no quise ser tan cruel. Por cierto, aún soy muy pequeña para comer frutos secos, así que se los comen ellos.
Espero que os guste la receta. Recordad, si vais a intentar dárselo a vuestro bebé no le digáis de primeras de qué está hecho!
Ah, y son perfectos para llevarlos en nuestras escapadas en el caracol porque aguantan bastantes días.
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